Nuestra Señora de la Santa Capilla, Paris

13 de diciembre:
París en 1239, Luis IX rey de Francia (luego canonizado por la iglesia católica), lleva ya tiempo dando muestras de su interés por los asuntos religiosos. Su espíritu le conducirá unos años después a participar en la séptima y la octava cruzadas, muriendo en Palestina durante ésta última.

Pero en este año el futuro San Luis ha logrado adquirir por una elevada suma lo que para él resulta una pieza excepcional: la corona de espinas que ciñó la frente de Jesús durante su calvario. Una reliquia inigualable a la que el rey piensa acompañar de otros objetos igualmente de interés.

Poco después ya posee un trozo del santo madero donde fuera crucificado Jesucristo.
Así pues, el rey toma la decisión de disponer dentro del conjunto de los palacios reales, de un templo donde pueda darse culto específico a estas reliquias procedentes de Tierra Santa. Se encarga la construcción del edificio a arquitecto Pierre de Montreuil, quien da inicio a las obras en el año 1242, y las finaliza 6 años después, considerándose un plazo muy breve para la época. Surgió así la Santa Capilla de París, una de las joyas de la arquitectura gótica francesa.

Este templo relicario presenta numerosas pecularidades. Una de ellas es que se trata de un edifico de dos plantas. La capilla inferior, dispuesta en tres naves, se consagró a María Santísima de la cual se celebra hoy su dedicación y que tiene atribuídos muchos milagros.

La Santa Capilla (Sainte-Chapelle, en francés), también denominada Capilla real de la Île de la Cité, es un templo gótico situado en Île de la Cité, en el centro de la ciudad de París, Francia. Está considerada una de las obras cumbre del periodo radiante de la arquitectura gótica. Fue construida para albergar las reliquias adquiridas por el rey San Luis de Francia, por lo que ha sido considerada como un enorme relicario. Las paredes han sido remplazadas por ventanas que filtran la luz a través de las vidrieras policromadas.

La historia de la capilla comienza en 1241 cuando fueron llevadas hasta Francia, desde Siria y Constantinopla, la corona de espinas, parte de la cruz, el hierro de la lanza, la esponja y otras reliquias del martirio de Jesucristo, que habían sido adquiridas por el rey Luis IX a Balduino II, último emperador latino de Constantinopla. El rey francés acudió a recibir estas sagradas reliquias y él mismo entró en París con ellas, descalzo, depositándolas de forma provisional en la capilla de san Nicolás de su palacio, hasta tanto se construyera una capilla digna de las reliquias. La Sainte Chapelle se inició probablemente en 1241 y fue consagrada en 1248.

La capilla baja, dedicada a la Virgen, accesible para la gente común y al servicio de palacio soporta la capilla alta (o superior).

El techo, sostenido por infinidad de columnas soporta el peso de todo el edificio; la capilla baja se construyó por su utilidad funcional y arquitectónica ya que permitió aliviar al máximo la construcción de la capilla alta y soportar todo el peso de la misma. Esta parte tiene planta de salón con tres naves; la del centro más grande; de detallada decoración policromada. La superior tiene una nave de 20 m de altura. Sobre cada pilastra se levanta la estatua de un apóstol. La esbeltez de las cortas columnas hace que la bóveda parezca más ligera.

Desde el punto de vista decorativo, se distinguen dos tipos de columnas en la Capilla Baja: las columnas azules decoradas con flores de lis, símbolo de la realeza francesa, y las columnas rojas decoradas con castillos de oro, símbolo de Castilla, por ser Luis IX hijo de Blanca de Castilla.

La capilla alta (o superior)

Las paredes de la capilla alta fueron prácticamente suprimidas, reemplazándolas por altos ventanales que dejan pasar la luz. Las vidrieras representan escenas religiosas. Fueron diseñadas situando a los personajes reales según sus cargos, así las que representan al rey David o al rey Salomón están situados cerca del rey.

Las vidrieras constituyen un conjunto homogéneo; los colores dominantes son el azul, el rojo y el amarillo que dan, a la capilla, un colorido muy característico. Las ventanas de la nave, de 15,35 metros de alto, por 4,70 metros de ancho, están divididas por cuatro ojivas, encima de las cuales hay un rosetón de 6 lóbulos y 2 cuatrilóbulos (elemento en forma de trébol de cuatro hojas). Las ventanas del ábside de 13,45 metros de alto, por 2,10 de ancho, sólo tienen dos ojivas y 3 trilóbulos (elemento en forma de trébol). Las escenas de las vidrieras representan:

el Génesis
el Éxodo
el libro de los Números
el Libro de Josué
el Libro de los Jueces
el Libro de Isaías
Juan el Evangelista y la infancia de Cristo
La Pasión
la vida de Juan el Bautista y el Libro de Daniel
el Libro de Ezequiel
el Libro de Jeremías y el Libro de Tobías
los libros de Judit y de Job
el Libro de Ester
los Libros de los reyes
La historia de las reliquias de la Pasión

El rosetón (lado Sur), de 9 metros de diámetro, representa el Apocalipsis.

La Santa Capilla de París

Información actualizada en 2013

La Sainte Chapelle, o Santa Capilla en español, es quizás la más famosa estructura gótica de todo el mundo. Su construcción fue ordenada por San Luis IX de Francia en 1248 y fue edificada en tan solo 7 años, todo un récord para esas épocas.

Algunas reliquias como la corona de espinas de Jesús y un pedazo de la cruz donde murió, estuvieron en algún momento resguardadas en la Santa Capilla pero más tarde, durante la Revolución Francesa, se perdieron.

Quizás lo que más llama la atención en la Sainte Chapelle son sus vitrales. En total, en la capilla hay unos 600 metros cuadrados de vidrio trabajado y al menos dos terceras partes son originales de la época en la que fue construida la capilla. Igualmente, durante la Revolución Francesa, algunos vitrales fueron destruidos pero la mayoría se salvaron gracias a que el edificio fue usado como oficinas administrativas.

La Sainte Chapelle está dividida en 2 secciones: la Capilla Inferior (Chapelle Basse) y la Capilla Superior (Chapelle Haute). En esta última es donde los grandes vitrales se encuentran. La Capilla Inferior era para el uso de los cortesanos mientras que la Capilla Superior era para uso exclusivo de la realeza. Puedes ver más información sobre estas dos capillas más abajo en esta misma página.

En el Siglo XIX la Sainte Chapelle fue restaurada por Eugène Viollet-le-Duc, un arquitecto francés famoso por sus restauraciones de edificios medievales y desde 1862 la Sainte Chapelle es considerado un monumento histórico nacional de Francia.
(fuente: wikipedia.org)