Notas historicas sobre el Santuario
La historia del Santuario de Nuestra Señora del Divino Amor, inicia en el siglo XIII, cuando en la zona del agro romano había una especie de fortaleza de la familia Savelli-Orsini, llamada Castillo de Leva. Sobre una torre del castillo había una imágen de la Virgen sentada en un trono con el Niño Jesús en brazos y con la paloma descendiente sobre ella como el símbolo del Espíritu Santo, que es el Divino Amor. La imagen, pintada en fresco en esa misma época, era muy venerada por los pastores de la zona.
El Primer Milagro
En la primavera del 1740 un viandante que se encontraba a Roma cerca a los alrededores de la torre, fue atacado por una turba de perros y estaba por ser despedazado; el viandante alzó los ojos, vio la Sagrada Virgen y pidió ayuda a la Madre de Dios; el milagro sucede: los perros se dispersaron improvisadamente huyendo por el campo.
Después del prodigio, el 5 de septiembre del mismo año, la imagen mariana fue segada del muro y transferida a la vecina hacienda dicha "La Falconiana", en la cual estaba la pequeña iglesia de Santa Maria ad Magos.
Después de cinco años, el 19 de abril de 1745, la imagen fue llevada de nuevo a antigua sede, donde en tanto habían contristrudo una iglesia que viene sucesivamente consagrada en 1750 por el Cardenal Cario Rezzonico, después haciéndose Papa Clemente XIII. Desde entonces iniciaron los peregrinajes populares que se hicieron cada vez mas numerosos, continuando a serlos todavía. Entre los mas importantes, los que se hacen desde la Pascua hasta los últimos dias de octubre, cada sábado en la noche a pie, desde el paseo Arqueológico cubriendo una distancia de cerca 15 km.
El 13 de mayo de 1883, el Capitulo Vaticano, encorona la imagen de la Virgen. En el 1930, viene nombrado rector Don Umberto Terenzi.
El 8 de diciembre de 1932, el Santuario se con- vierte en parroquia, y Don Umberto es el primer párroco.
El 25 de marzo del 1942, Don Umberto instituye la Congregación de las Hijas de Nuestra Señora del Divino Amor, siguendo veinte años después los sacerdotes Oblatos, que desde entonces el Santuario es custodiado por ellos.
La salvación de Roma
En el 1944, mientras Roma corre el peligro de ser destruida por los eventos bélicos, el 24 de enero el cuadro de la Virgen viene transferido a la ciudad en varias iglesias, terminando en aquella de San Ignacio donde el 4 de junio del 1944 el pueblo romano, para obtener la liberación de la ciudad, hace un voto a la Virgen de renovar la propia vida, de construir un nuevo Santuario y de realizar una obra de caridad en su honor. La Virgen cumplió el Milagro y Roma fue salvada.
El Papa Pió XII el 11 de junio de 1944 va a orar con los romanos y le da a Nuestra Señora del Divino Amor el titulo de "Salvadora de la Urbe".
"Nosotros miramos hada tí, Madre del Divino Amor, esperando de tí, de tu materna intercesión nuestra salvación...
proteje tu Roma"
(Pió XII, 11 de junio 1944)
Depués de la guerra e] Santuario reabre sus puertasse desarrollan obras caritativas, culturales y de apostólado. Comienza la publicación de las revistas "Parrocchia" en 1946 y "La Madonna" en 1954, mientras el folleto "La Madonna del Divino Amore" hecho en 1931, reanuda sus publicaciones.
En la casa de las hermanas vienen hospitadas las primeras huérfanas, mientras poco a poco se forman otras casas religiosas en varia parte de Italia y al exterior con las Misiones en Colombia en 1971,en Brasil en 1991 y en Períi en 1993.
El 3 de enero de 1974 muere Don Umberto Terenzi; sus restos reposan al Santuario en la cripta de la Addolorata.
En 1975 se ha iniciado seimpre en el Santuario la lendopoll Mariana nacional de jóvenes.
El primero de mayo de 1979 el Papa Juan Pablo II visita el Divino Amor y lo define "El Santuario Mariano de Moma . Vuelve para el 7 de junio de 1987 para la apertura del Año Mariano.
Desde 1983 está en funsion la Casa del Pelegrino, para convenciones, retiros, ejercicios espirituales.
Desde 1983 el domingo de Palmas y Viernes Santo a las 20.30, se hace la mas espectacular y sagrada representación romana del Via Crucis.
En los años 80 se han hecho muchos trabajos de restauración del Santuario y en 1991 se hizo la delicada restauración del altar y del antiguo y precioso fresco de Nuestra Señora del Divino Amor.
El 29 febrero de 1991 ha sido publicado el edicto del Cardenal Vicario Gamillo Ruini, para la canonización del Siervo de Dios Don Umberto Terenzi, fundador de la obra de Nuestra Señora del Divino Amor.
El Sinodo Diocesano abierto en 1986 y concluido en 1993 delante a Nuestra Señora del Divino Amor en la plaza de San Pedro, constituye el evento más importante de la Iglesia Romana para dar el voto a travez del renovamiento espiritual, y el crecimiento de la comunión en la misión de la Iglesia hacia la Ciudad y hacia el Mundo.
El Nuevo Santuario
El 19 de febrero 1991 se firmó el permito de construcción para el Nuevo Santuario que habrá por techo un prado verde, un espejo de agua en el sagrado, por paredes unas inmensas vidrieras de colores que darán una luz mística a todo el espacio. La construcción se está realizando a los pies de la colina, fuera de los antiguos muros sin violar el encanto del campo romano y el conjunto monumental del seteciento.
Pelegrinaje nocturno a pie
Cada sabado de Pascua se hace el pelegrinaje nocturno a pie, a partir de la medianoche desde Roma, plaza Porta Capena, terminando en el Santuario a las 5 a.m. del domingo. Un pelegrinaje nocturno también "e realiza el 7 de diciembre vigilia de la Imaculada. Los pelegrino" de la noche recorren la famosa via Appia antigua hasta el Quo Vadis, donde toman la ria Ardeatina pasando sobre las catacumbas de San Calixto y delande el museo de las fosas Ardeatinas, llevando a los pies de la Virgen, junto a las propias Intenciones también las necesidades, las operanza" y la misión de la Iglesia Romana y de la Ciudad Eterna.
ORACION A LA VIRGEN DEL DIVINO AMOR
Oh Virgen Inmaculada Maria Madre de Dios y Madre nuestra, Madre del Divino Amor, a Ti dirigimos nuestra sùplica confiada esperando conseguir las gracias que necestamos. Tù que mereciste ser saludad por el Angel: "Llena de gracia!", puedes alcanzarnos todo.
Sì. oh Maria, verdarderamente tù eres Ilena de gracia, porque tu celestial Esposo, el Espìritu Santo, con su divino amor, vino a morar en tì desde el primer momento de tu concepciòn, preservàndote de toda culpa y conservàndote imaculada; de nuevo volviò a tì el dìa de la annunciaciòn, y Te ha echo Madre de Jesùs, permaneciendo intacta tu virginidad; sobre Tì vino a posarse el dìa de Pentecostés colmàndote con sus siete dones, de modo que Tù eres la tesorera y la fuente de las gracias divinas.
Tù, pués, Madre dulcísima del Amor Divino, esucha nuestras sùplicaz.
Dà al mundo la paz; haz triunfar tu amor; protege al Papa, reune en la unidad perfecta, querida por tu Divino Hijo, a todos los cristianos; ilumina con la luz del Evangelio a cuantos aùn no creen; vuelve los pobres pecadores a Dios y a nosotros danos también la fuerza para llorar nuestros pecados y vencer en adelante las tentaciones; ilumina nuestras mente de mondo que sigamos siempre el camino del bién, y finalmente, cuando Dios nos llame, àbrenos las puertas del cielo.
Y mientras tanto, Tù que nos ves gemir y llorar en este valle de làgrimas, socòrrenos en nuestras miserias, consérvanos la resiniaciòn en las inevitables cruces de la vida, cura, oh Maria de la gracias, nuestras enfermedades, devulve la salud a los enfermermos que acuden a Tì.
Mitiga, oh Maria , y libra de las penas del Purgatorio las almas santas, particularmente aquellas confiadas a la obra de los sufragios del Santuario y a las vìctimas de todas las guerras.
Mira maternalmente y protege las obras de tu Santuario del Divino Amor, y a nosotros tus hijos, concédenos, oh dulcisima Madre, que podamos siempre alabarte y que nuestro corazòn se inflame en tal forma del amor divino en esta vida para que podamos gozar eternamente contigo en el ciel. Amen.
ORACIÓN DEL SANTO PADRE JUAN PABLO II
A LA VIRGEN DEL DIVINO AMOR
Salve, oh Madre, Reina del mundo.
Tú eres la Madre del Amor Hermoso,
Tú eres la Madre de Jesús, fuente de toda gracia,
el perfume de toda virtud,
el espejo de toda pureza.
Tú eres alegría en el llanto, victoria en la batalla, esperanza en la muerte.
¡Como dulce sabor tu nombre en nuestra boca,
como suave armonía en nuestros oídos,
como embriaguez en nuestro corazón!
Tú eres la felicidad de los que sufren,
la corona de los mártires,
la belleza de las vírgenes.
Te suplicamos que nos guíes, después de este destierro,
a la posesión de tu Hijo, Jesús.
Amén.
(Visita delPapa Juan Pablo II al santuario romano de la Virgen del Divino Amor.
Martes 1 de mayo de 1979)